Azares


 
En la mañana me llegó una bandera por correo de parte de Felipe Calderón, creo que por aquello del bicentenario, la amarré a un palo y salí a la calle junto con gatopantera a marchar cual escolta de escuela, ella se sabe todo el proceso, como se entrega, como se marcha, la marcialidad que esto conlleva, como también, el respeto a nuestro lábaro patrio, ella ama a su bandera y yo la amo a ella. Por ella, yo creo en la bandera.

Hoy rescataron a 33 mineros chilenos -uno de ellos infiel- el Presidente Chileno estuvo con ellos, muchas cámaras, muchas sonrisas y algunas lagrimas y porras; un acto que lo equiparan con la caída del muro de Berlín, yo tomo mi opinión y me la guardo. Se vendió a través de los medios la idea de un chile unido y de excelente manera; ahora el evento del mes, ha dejado descansar el escenario y bajó el telón, he de esperar que nos mostrarán después.

ya en la noche le gané a un amigo jugando ajedrez de manera horrible por que el juego se descompuso con una mala defensa mía, regresé a mi casa y use twiiter por un momento, tomé un café y abrí un libro que llevo dos semanas de leerlo y aún no lo termino. Solo leí 20 páginas.

Llegaron mis padres, era noche, platique con ellos algunas noticias, les conté de mi hija –ya saben, de la bandera y dos juegos que tuvimos- de los mineros, de algunas noticias que sé son del agrado de ellos, entonces vi que recomendaban una película llamada From Paris With Love donde actúa y le da bastante peso John Travolta, fue una hora y media bien aprovechada.

Quería postear algo que tuviera gracia, o poner algún post que debo, pero no puedo, entré a ver un comentario que dejé en el blog de José de la Cruz, un “amigo” que no tengo el gusto de conocerlo personalmente pero que aún así no le impidió ayudarme cuando comencé mi blog, y en eso… vi el blog de Mayricienta; un blog olvidado, muerto y lleno de telarañas, suspendido en el tiempo con un icono de un oso bailarín que bailará eternamente.

Y me llevo a reflexionar, adoro los sesudos dichos de @alejodorowsky por twitter, como a otros más que abundan ahí y en otras redes sociales y blogs, pero también tengo vida, veo como nos venden los medios con más poder la situación actual del país, que pareciera vive en una naciente guerrilla y me pregunte por que el mexicano promedio se la cree de esa manera. No vivo en Tampico o en Monterrey, pero se que todo este alboroto no representa al país entero, bueno, es mi humilde opinión. agradezco que hoy no me haya pasado nada, que tuve la libertad de jugar con mi hija, que comí como pelón de hospicio, que salí a jugar ajedrez, que leí las noticias y que vi llegar a mis padres, no viví este día como si fuera el último día de mi vida (por que si no al dormir estaría asustadísimo) pero no estuvo mal, ahora se de donde viene eso, esa libertad, que no tenemos totalmente comprada, que en cada esquina esconde un revés y que si no nos fijamos bien, nos toca y ahí si que ya se chingó la cosa, hoy de alguna forma fui libre por esa bandera que ondulaba con la brisa del viento –ay que mamón- gracias al soporte de un palo de escoba, por que de alguna manera ese pedazo de tela representa mi patria, mi país y con malos presidentes, senadores, diputados y policías o sin ellos, he de vivir aquí, no por conformismo, si no por decisión, por amor a lo que significa esa bandera, donde reposa el amor de mi hija y que de alguna forma he de proteger los valores que ésta significa ¿por qué? por todo lo que viví este día, que no fueron grandes cosas -lo acepto- pero que son lo que hicieron que le llamara a este día; vida y si algo me reclamara mi cumplimiento a lo que representa esa bandera, que así se me exija y si lo hago, no será por soberbia, será por la gente que como yo, tiene este tipo de azares que tuve el día de hoy.

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