quinceañera

Si algo me molesta, son los y l@s niñ@s gritones, pero lo que mas me asusta (además de los perros ninja) son las niñas gritonas y remilgosas de 15 años, esta pequeña pero siempre constante fauna de seres quinceañeros son un dolor de muelas y yo me pregunto, ¿y todo este desmadre.. ¿Para que? ¿Para engordar mil gorrones? no lo creo, se que es la ilusión de muchas jovencitas el ser presentadas como “cancha oficial” ante la sociedad, pero..¿Este rito es realmente necesario?


en la antigüedad los varones que alcanzaban esta edad eran expuestos a serias pruebas donde tenían que demostrar a base de fuerza sangre y coraje que eran dignos de pertenecer en sus tribus como hombres nacientes, de las damas, solo les hacían ritos… para entregarlas a sus dioses paganos. y ya.


se acostumbraba a casar a sus hijas a esa edad en algunas civilizaciones y bla, bla bla…


me ahorro los datos históricos para llegar a esta costumbre de valses cantados por chayanne con una gran influencia francesa y vestidos de colores arto vulgares y holanosos, el salón alquilado o la finísima calle cerrada, los cartones de cerveza, los padrinos o padres alcohólicos dedicando algunas palabras en lenguaje de ebrios a la quinceañera, los tíos o parientes peleándose y sin faltar la coreografía en donde algún chambelán desnutrido termina por tirar a la susodicha…


Pero veamos el lado práctico y económico:


Un vestido de esos, suele costar unos 3 mil del águila así barato, hasta llegar a los 15 o hasta 35 mil volovanes.
El salón puede ahorrarse cerrándose la calle o pagar el mas modesto que puede cobrar de 2 mil varitos por noche hasta uno mas ostentoso (por que seamos sinceros, la princesita quiere apantallar de lo lindo valiéndole madres que el peso y el país se esta mudando del quinto al séptimo infierno) de entre 5 hasta 35 mil pesos by nigth por cierto, vi una vez una fiesta de 15 años que tuvo los huevos de cerrar la calle.. Enfrente de un salón.. Matando dos pájaros de un tiro, digo, se me hace que quisieron alquilar el salón pero como no pudieron y el dueño se puso pedante, le cerraron el changarro poniendo su pachangón enfrentito, por cierto doña leo.. esas carnitas le quedaron de huevísimos.


por ultimo la comida y el chupe, aquí el banquete dan pollo enchilado, pasta o sopa de sabor culerísimo, solo he ido a unos quince donde dieron un filete bien chingón, sopa de champiñones y trufas de postre, así como una barra libre con los mejores vinos.. slim, desde aquí te mando un saludo.. ¿En qué iba?.. Ah que por lo regular dan una comida culera, o no tanto pero de todos modos terminara con una mordida en la pierna y directo a la basura, del chupe ahí es donde no puede faltar y mínimo para empezar unos 20 cartones de chelas nada mas para la familia principal así como unas 10 cajas del mas empedante tequila teniendo invertido en el banquete como 10 mil varos (bien servido) y de las chelas y el chupe como otros 10 mil pesitos, pa la primera ronda.


Se le suman mas gastos imperceptibles para el ojo común, el costo de los chambelanes y la puesta finísima del vals (con su ahora nueva y muy gustada sección de regueton que las princesas de hoy no deben de dejar pasar si quieren presentarse como “señoritas” de buen gusto en la sociedad) la tiara, su medallita... la que se cuelga en el cuello. Puercos. Las zapatillas, el adorno del carro, los antidepresivos de la madre, los arreglos de flores que terminan chingandose los invitados y un sinfín de gastos pequeños que juntos suman cantidades que van de 5 mil a 15 mil según el caché de la fiesta.


Me faltó mencionar mas cosas (como el grupo que ameniza y el sonido con “padrísimas” luces roboticas), pero llegando a la conclusión de los gastos, una fiesta ñerisima de quince años sale mas o menos entre 15 mil pesos a 25 mil pesos y ya algo de mas caché-te ronda las escalofriantes cantidades de 45 mil peso hasta llegar a 200 mil pesos o mas (donde por lo regular, los padres le regalan un cochecito a su damita, raro pero se da)si no es que más.


Es el sueño de ellas, del as princesas de la casa que como sabemos, un adolescente es muy considerado para pedir humildemente estas cosas (en otras palabras, les vale madre que su padre este desempleado o alguna madre asi, ellas quieren sus quince) pero veamos, que se puede hacer con esa lana:
Con 24 mil pesos, le puedes pagar un curso de ingles y computación el la escuela especializada de tu preferencia (creo que en eso anda el curso de Inglés Individual) para que si no sabe hablar bien el español, tu princesa pueda apantallar a la chaviza hablándoles en ingles, así en vez de legarle un día de dudoso esplendor, le des una herramienta para que pueda salir adelante.


Con mas lana, le puedes comprar una lap top para que tengo cibersexo y no te salga embarazada ni con enfermedades que son mas caras de curar, además que será la envidia de la prepa abierta.


Puedes también darle un viajecito a cualquier rincón playero de nuestro México lindo y querido, con suerte se traiga de recuerdo a un lancherito en sus entrañas haciendo de ese viaje, algo edificante e inolvidable.
O puedes enseñarle el valor del ahorro e invertir sus 20 mil 40 mil pesos o lo que sea e invertirlo en algún banco o caja de ahorro como la cofia… a chinga, ¿que la cofia ya no existe? bueno, en la compartamos o cualquier lugar para que vea como crece su dinero.


Ya si es buena lana, pueden invertir esa billelle en su educación metiéndola en alguna prepa de paga para que con el tiempo tenga mejores relaciones sociales y tenga mejores herramientas sociales que llevarse con el hijo del taquero para que le ponga limoncitos extra, no es lo mismo que la embarace el “chino” a que la embarace el hijo de algún diputado. (Bueno, si es lo mismo)


Pero bueno ustedes tienen la última palabra, no digan que no se los advertí. Nos vemos, festejando.

Entradas populares de este blog

el arte de aprender

Día de reyes.

secreto en el balneario