Desvelado

Ahora no abriré como un cobarde el WORD, escribiré aqui a como me salgan las letras, bueno, pues aclarado esto les cuento (supongamos que nos interesa):

1.- He estado manejando mucho últimamente y he aprendido dos cosas, que extraño ser copiloto y que hay muchos "tapetitos de peluche" en la carretera; me gusta ir pendejeando, mirando de un lado para otro, no me gusta manejar, tengo que estar atento al frente siempre, hay muchos perritos aplastados y afortunadamente no he despanzurrado a ninguno, pero se que ya esta cerca.

2.- hay mucha gente que no sabe a donde ir, me siento a veces como el principito que esta en la estación de trenes, no mas los veo ir de aqui allá, con semblantes grises, alejados en la mente del que tienen cerca, cada quien en "su espacio", claro, no todos son así, los únicos que veo que buscan "ser" con otros son los niños, que le estan chingando a sus padres a cada rato, es bueno saber lo que quieres, no es tan difícil y no vale tanto la pena el pensarlo tanto, aprendo de los niños, que no más con chingar se contentan.

3.- Hoy conocí a una persona fascinante, inspiradora, y simple. No le hablé, yo estaba trabajando, fuí a ver un cliente y cuando pasé enfrente de una tienda de frutas, ahí estaba con esos ojos grises observandome, yo la vi y a ninguno de los dos le dio por dar esa sonrisita para caer en gracia, para mostrarse simpático, no, creo que ambos conocimos ese momento, o a lo mejor son mis nervios, pero me gustó ese momento y solo ese momento me bastó, despues me subí al carro, miré por el retrovisor y ahí estaba ella, observandome y con la boca entreabierta, ahogando una palabra que jamás fue dicha, ahora su rostro se desvanece, se parece a tantas personas en mi memoria, se parece a nadie. Ese momento se fue.


4.- En el trabajo una compañera me pidió mi correo electrónico, no me agregó, tenia unos extraños ojos de gata, no era muy guapa, era la hija de alguien, la hermana de alguien, la compañera de alguien, era alguien, pero no era yo. La despidieron al día siguiente y aun no me ha agregado, creo que será de esos recuerdos que no importan pero que saldran cual fantasmas por la noche y me preguntará: ¿que habría sido?

5.- Estaba platicando con alguien y le pregunté que le gustaba de mi (momentos antes le habia dicho que, mmmm algo sobre sus enormes tetas, no recuerdo bien)y me contestó que le gustaban mis ojos y mi sonrisa (la que yo conozco como mueca)pero que lo decia como que era lo que yo tenia de atractivo, creo que no soy su tipo, y ella definitivamente no es mi "tipa", por que se que ella no se quiere, se que carga una pesada losa en su lomo (espalda pues, ash con ustedes)y no me gusta ese tipo de "tipas". el pedo es que todos cargamos algo así.

6.- también me dijeron que me creía un chingo, que era muy creído, y le pregunté ¿tu crees que yo me creo? y me dijo que si, entonces es tu problema y no el mío -le seguí diciendo- ¿y que pasaría si descubrieras que lo que "me creo" es cierto, que harías entonces? no se, entonces seguirá siendo tu problema -le dije al pendejo-.

7.- Extraño mucho a mi hija, ya casi no la veo, tambien quiero salir con alguien, quien sea, bueno, de preferencia mujer, no más por salir, tiene años.. AÑOS que no hago eso, pero no se confundan, quiero salir no más por salir. quiero esccuchar mi voz en su voz, quiero escuchar el compas de una sonrisa, así de simple y mamón soy a veces. una mujer que dice que me conoce y que dice que sabe quien soy, no me creería, desde aqui te digo anahí (o anaid) Chinga tu madre. Así o más claro (le pasaré el link de mi blog, no soy un pendejo que tira la piedra y esconde la mano, soy un pendejo que la tira, y se ríe solito y despues le meten una putiza, por que con una dama no se habla así, y la dama tiene razón, pero para esto, el daño ya esta hecho)

8.- en fin, esto es en parte mi vida, trato de llegar aqui y escribir un cuento que haga que valga la pena el que lo lean, pero no he hecho nada, estoy cansado, me duele todo, más la boca, por que he usado mucho mi "mueca" sonrío demasiado y soy muy amable, tambien hecho ojitos, y solo le digo guapas a las feas, y les alegro el día, sonrien y brillan y justo en ese momento el feo soy yo, y recuerdo aquello que me dije: dicen que aqui venimos a sufrir Mauricio, ¿lo crees así? Sí -me contesté- pues si es así, nuestro deber es tratar de crear el menor sufrimiento a los demás, ¿y luego? -me pregunté- pues, nada.

9.- Estoy tan ocupado viviendo mi vida en la vida de los demás. Con unas ganas de compartir soledades.

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